Bueno, veo que más de uno lo habéis usado.
La verdad es que si, lo considero útil.
Ahora está cayendo una buena... y dentro de un ratin tendré que sacarla a pasear... nos vamos a empaparr!!!!
Los perros no son todo en nuestra vida, pero ellos la hacen completa.
yo se lo compré a Max el año pasado en Andorra, demasiado nieve y me daba apuro que en el hotel entrase chorreando y la verdad que es que me quita un montón de agua en casa cuando llueve.
Kiss también tiene.
personalmetne yo no vestiria a mi perro ni loca. Considero que los perros son perros y hay que mantenerles un poco la dignidad de lo que son . Para vestir estan las personas y los muñecos , como excepcion si lo haria con perros con algun tipo de reuma o artrosis siendo ya muy mayores . Pero vamos que total respecto a los que les gusta llevarlos vestiditos pero me parece triste
triste???????? sin comentarios, sólo te digo vente pal Norte un invierno lluvioso y entonces hablamos
El hecho simple de que mi perro me quiere más que yo a él constituye una realidad tan innegable que, cada vez que pienso en ella, me avergüenzo (Konrad Lorenz).
Yo tampoco soy muy partidaria de la moda en los perros pero se que en algunos casos es necesaria y en otras es practica.
Hay perros que no tienen tanto pelo o doble capa de pelo que los protega del frio del invierno (que en algunas zonas de Espeña es muy extremo) y veo bien que les pongan jerseys o abrigos.
Y en el caso del chubasquero, que yo tengo uno para Duna, lo veo muy practico, porque siendo mi perra de tamaño mas bien grande, tendria que estar bassssstante rato secandola con toalla y secador y con el chubasquero apenas se moja un poco la cabeza.
Quien distingue la sonrisa de un perro ha dejado de ser animal.
pues sólo decirte q mis perros son muy dignos con sus chubasqueros y si no, no salían ni a tiros, y no son los únicos q conozco q les pasa. Y nada tristes, la verdad es q al menos así pasean lo q les da la gana. Y para mí un placer secarles menos pelo menos veces al año
El hecho simple de que mi perro me quiere más que yo a él constituye una realidad tan innegable que, cada vez que pienso en ella, me avergüenzo (Konrad Lorenz).