Acostumbrado como estaba a sobrevivir sin contacto con nadie, comiendo desperdicios que encontraba por el pueblo y comida que le dejaban algunos vecinos, al llegar al albergue estaba muerto de miedo al verse rodeado de gente y de un montón de perros.
No paró de temblar, se sentó en uno de los cuartos y se quedó paralizado, sin entender lo que estaba pasando. Aún así se dejó revisar sin problema por la veterinaria.

Ahora Pipo está mucho más adaptado al albergue. El pánico que tenía a las personas ha desaparecido y se deja tocar y coger sin problemas. Incluso se pone contento cuando alguien llega al albergue. Tiene unos 6 años.
Con los demás perros no se relaciona mucho, aunque un par de veces ha jugado un poco con una perra llamada Sassie, pero normalmente la única actividad de Pipo es dejar pasar el tiempo tranquilamente tumbado al sol.

Para adoptar, apadrinar o acoger, escribir un mail a aatcsahagun@gmail.com
Amigos de los Animales de Tierra de Campos Albergue de Sahagún:
http://alberguesahagun.blogspot.com/2009/05/pipo.html