EL otro día estaba mi pareja en el parque con los perros (Raziel y el cruce de mastín) a la 1 ó 2 de la mañana, y aparece un tipo un poco rarito que también va por allí con un teckel. La cuestión es que iba bebido, mete al perro en la zona vallada y se queda él fuera. Cuando se cansa va a por el suyo (que no le hace ni caso, las cosas como son), salta la valla y mi novio le dice que se lo iba a acercar. Al tío este se le cruzan los cables y empieza a preguntarle que de dónde es y chorradas así, pero acercándosele a la cara y levantando la voz. Y el pequeño, claro, se pone a ladrarle. El otro se agacha y con los brazos levantados empieza a burlarse del ladrido, con lo que el pequeño le vuelve a ladrar. Y en eso, el cruce de mastín (que andaba tan tranquilo agujereando el parque) lo mira, se levanta y se acerca, rapidito y ladrando. Cuando llega a él salta y le pone (por la espalda) las patas delanteras en los hombros, con lo que el hombre se caga y empieza a avanzar poco a poco para quitárselo de encima, coge a su perro y sale, sin girarse ni decir ni mú. El cruce de mastín se quedó al lado, mirando cómo se iba y ya está.
¿Podría haber llegado a atacar si las cosas se hubiesen puesto más feas? ¿Es peligroso que defienda al pequeño? En parte me sentí orgullosa de él, pero claro... era una situación en la que nunca nos habíamos visto. Y me asusta que algún día alguien se ponga tonto de verdad y la pague él.
