¿¿Por qué los esconde???

[mamilola]

Bueno, no es que me moleste ni mucho menos, pero me muero de curiosidad.... resulta que Lola, desde que le dimos un huesecito de esos hechos con piel de buey (de esos blancos que tienen los extremos anundados) primero se los come hasta que le queda un nudito, y dps se tira todo el tiempo escondiéndolo por todas partes: debajo de las almohadas, debajo de las mantas, entre los cojines del sofá, detrás del paraguero, etc etc etc.
La verdad es que es super simpático, porque no lo esconde de nosotras, es decir, no le importa que nosotras la veamos mientras lo esconde, incluso cuando no encuentra buen sitio nos pide ayuda (llora y llora con el nudito de hueso entre los dientes para que le digamos un sitio, en cuanto lo encuentra, lo deja y se va tan campante, y luego siempre se acuerda en dónde lo ha dejado).

Cuando lo coge, se pone muy contenta, lo mira, lo vuelve a coger, lo vuelve a mirar, corre hacia un lado, hacia el otro, lo coge, lo suelta,.... pero no se lo come, ese trocito es solo para esconderlo.

El caso es que no hace lo mismo con ningún otro juguete, solo con los huesos que os describí antes...


¿¿Por qué lo hará???

[Monte]

Eso es el instinto de guardar su caza, sus tesoros. Los míos los huesos los entierran, y los sacan días después (asquerosos, por cierto). Se ve que Lola, a falta de tierra, los esconde

[mamilola]

AAAhhhhhh... joer, son la caña, cómo se adaptan al medio!!

[monicaalex]

Los míos nunca han hecho nada de eso, será que no tienen instinto de caza...

[miguel_oviedo]

Los perros siempre esconden cosas, yo los que tengo en el pueblo tienen toda la finca con agujeros, le puedes dar un hueso hoy, lo esconden, y dentro de 4 o 5 días aparecen con él lleno de tierra...

En casa, al no poder hacer eso, pues los esconden por donde pueden.

[Monte]

El caradura de Chico, cuando les damos un hueso a cada uno, entierra el suyo y se dedica a mirar a Sira y mirarnos a nosotros con cara de "pobre desdichado, yo no tengo hueso", a ver si así pilla el de ella. Cuando Sira --muy aplicada para todo-- se termina el suyo, Chico va, desentierra el que enterró y se lo zampa delante de las narices de la pobre Sira. Sólo le falta hacerle burla, vamos.

[mamilola]

JJAJAJAJAJAJAJAJAJJA,QUÉ BUENO, MONTE!!! si es que son la leche, yo no dejo de sorprenderme! Acabo de leer un mensaje publicado en otra dirección que tb me ha dejado

"hace unos dias que nos hemos dado cuenta que nuestra kuka esconde huesos y xuxes debajo de los cojines del sofa o debajo de su cama o en algun rincón... se pone muy graciosa cuando intenta taparlo con la cabecita! ya se que todos los perros lo hacen pero no sé el porqué... alguien podria decirme la razón? con lo glotona que es nos sorprende ver como lo esconde y no se lo come...
El otro dia nos lió una gorda: aprovechó que se quedó sola en el comedor (en 3min aprox.)para salir al balcón, coger la tierra de las plantas con la boca y llevarsela al sofá!!! nos llenó el sofá entero de tierra para poder esconder su hueso... la regañamos, pero luego nos reimos mucho pensando en como se las habia ingeniado!!"

Lo dicho, son la leche!!!

[Gray]

Enterrar o esconder la comida es un instinto milenario (como ya han dicho antes) y va en los genes, aunque bien cierto es que no todos los perros lo conservan con la misma intensidad.

En mi caso, mi máquina vino de fábrica con el instinto grabao a fuego porque hasta se mosquea cuando la miramos hacer un cacho joyo para enterrar una simple miga de pan. Creo que en cualquier mina la contratarian al instante.

Acabaría haciendo esto si no la controlara

[invitada]

Gaia los entierra en las macetas... y luego me los mete en la cama puaggg

[Monte]

Y lo peor no es lo que entierran, es lo que desentierran (puag). Yo, antes de que Chico creciera, enterraba a los pajaritos que mataba la capulla de mi gata. Pero, en cuanto Chico tuvo ocho o nueve meses, empezó a desenterrar una y otra vez los pajaritos. Hubo uno que lo desenterró cuatro veces, cada vez más putrefacto, hasta que me harté y lo tiré a la basura.

Desde entonces, la basura es, directamente, el triste destino de los pajaritos