Su juego es sacarlos (todos) y ya luego yo se los voy recogiendo. Como mucho unos cuantos pitidos.
Están nuevos, ya ves, si tiene los colmillos del tamaño de medio grano de arroz.
Pues el dia que llegó Sawyer a casa (un par de meses antes de que ella se pusiese malita) se fue flechado para la cesta jajajajaja.


Si vieses la cara de mi niña, esos ojos que se le iban a salir, temblando...


Y ahi está Rosi de testigo de lo que hizo la peque. Estabamos sentados alrededor de la mesa y Rosi le quitó a Sawyer el peluche de Lara y lo puso en la mesa.
Lara estaba dentro de la sudadera de su papi con la cabecita por fuera mirándolo todo.
Salió muy sigilosa, dió varios pasitos por encima de la mesa hasta el peluche. Lo cogió todo babeado y lo metió con ella en la sudadera.
Mi niña!


